Apple intentó intervenir en el juicio antimonopolio contra Google en Estados Unidos, pero su solicitud fue rechazada por los jueces.
La empresa quería presentarse como una parte interesada en el proceso, alegando que también se vería afectada por las decisiones tomadas contra Google.
Sin embargo, la Corte de Apelaciones del Circuito de DC mantuvo la decisión anterior e impidió la participación de Apple en el caso.
¿El motivo? La gigante de Cupertino tardó demasiado en intentar involucrarse; el proceso judicial comenzó en 2020, y Apple solo hizo su solicitud en diciembre de 2024.
Este caso gira en torno de los acuerdos multimillonarios que Google hizo con empresas para mantener su motor de búsqueda como la opción predeterminada en navegadores y dispositivos móviles.
El Departamento de Justicia de EE.UU. (DOJ) acusa a Google de usar estas asociaciones para fortalecer su monopolio en Internet.
Uno de los principales beneficiados por estos contratos fue la propia Apple, que habría recibido alrededor de US$ 20 mil millones en 2022 y US$ 18 mil millones en 2021 para mantener Google Search como el motor de búsqueda predeterminado en Safari, el navegador oficial del iPhone, iPad y Mac.
Si Google es considerado culpable y los jueces deciden que estos contratos deben ser cancelados, Apple perdería una fuente significativa de ingresos.
Por eso, la empresa intentó intervenir en el proceso para defender sus intereses. En febrero, argumentó que Google «ya no puede representar adecuadamente los interess de Apple.»
Pero el juez Amit Mehta rechazó la solicitud, y ahora la decisión ha sido reafirmada por la instancia superior.
Con esto, Apple quedará fuera del juicio y tendrá poca influencia en el desenlace del caso. Google, por su parte, no ha comentado sobre la decisión.
El Departamento de Justicia ya ha presentado propuestas para reducir el dominio de Google, permitiendo solo acuerdos entre las empresas que no involucren su motor de búsqueda.
Una audiencia sobre estas medidas está programada para abril, y la decisión final debe salir aún este año.
Sin embargo, Google ya ha confirmado que planea apelar, lo que significa que esta batalla judicial podría prolongarse por un buen tiempo.