✨ Puntos clave:
- En entrevistas y eventos, ejecutivos de Google afirman que la web nunca ha estado tan activa.
- En los tribunales, la empresa dice exactamente lo contrario: que la web ya está en rápido declive.
- Esta diferencia de discurso está directamente ligada a la disputa legal sobre el futuro de las herramientas de publicidad de Google.
Dos versiones opuestas sobre el estado de la web
En los últimos meses, Google ha defendido dos versiones completamente opuestas sobre el estado de la web:
- En entrevistas y presentaciones públicas, sus ejecutivos repiten que el escenario digital está en crecimiento, con más contenido y consumo que nunca.
- En documentos presentados a la Justicia en Estados Unidos, la empresa sostiene que la web abierta está en «rápido declive».
Esta aparente contradicción no es casualidad. El discurso varía según el contexto:
- Para el público, la idea es mostrar optimismo.
- Ante jueces y reguladores, el tono de crisis ayuda a evitar medidas que podrían obligar a la empresa a vender parte de sus negocios en publicidad online.
Lo que Google dice en público
El CEO Sundar Pichai comentó en mayo que el número de páginas que Google encuentra al rastrear la web creció un 45% en los últimos dos años, lo que demuestra vitalidad.
Otros ejecutivos, como Nick Fox (vicepresidente de Búsqueda) y John Mueller (defensor del área de SEO), también refuerzan la narrativa de que la web está «floreciendo» y llena de nuevas oportunidades.
Según ellos, el consumo de información sigue fuerte y la creación de contenido continúa acelerada, especialmente en tiempos de inteligencia artificial (IA).
Lo que Google dice en los tribunales
En un documento judicial, los abogados de Google presentaron otro panorama: según ellos, la web abierta ha perdido espacio y relevancia, en parte por la migración de anunciantes hacia formatos más modernos, como publicidad en TV conectada, medios minoristas y soluciones basadas en IA.
Para sustentar este argumento, la compañía destaca cifras preocupantes:
- En 2019, los anuncios mostrados en la web abierta representaban el 40% de las impresiones en su plataforma de publicidad.
- En 2025, esa participación cayó al 11%.
Con este discurso, Google busca convencer a la Justicia de que obligar a la empresa a deshacerse de sus negocios de publicidad perjudicaría aún más a los editores que dependen de los ingresos de la web abierta.
El impacto detrás de la contradicción
Esta incoherencia plantea preguntas importantes:
- Si la web estuviera realmente en declive, el temor de los editores sobre la disminución del tráfico debido a la IA estaría confirmado.
- Si estuviera en expansión, como sugieren los ejecutivos, no tendría sentido que la empresa argumente lo contrario en procesos legales.
La tensión ocurre en medio del lanzamiento de los AI Overviews, resúmenes con respuestas generadas por inteligencia artificial directamente en el buscador.
Esta novedad ha sido duramente criticada por expertos que señalan que podría reducir el tráfico enviado a sitios de contenido.
Las reacciones de profesionales del área de SEO en redes sociales muestran su malestar: para muchos, Google, que concentra un enorme poder en la definición de cómo las personas acceden a la información, no puede simplemente eludir su responsabilidad sobre el futuro de la web abierta.