Un reciente incidente en Windows 11 ha dejado a los usuarios indignados con el enfoque agresivo de Microsoft para promover su motor de búsqueda Bing y su navegador Edge.
Pop-ups intrusivos comenzaron a aparecer, forzando a los usuarios a cambiar el motor de búsqueda predeterminado de Chrome por Bing.
Estos pop-ups no son simples notificaciones, sino archivos ejecutables invasivos que aparecen por encima de las aplicaciones y juegos en ejecución.
Esta práctica de Microsoft ha generado indignación y confusión entre los usuarios, muchos de los cuales inicialmente creían que se trataba de malware.
La empresa constantemente intenta dirigir a los usuarios de Chrome hacia Edge y a los de Google hacia Bing, utilizando solicitudes, pop-ups e incluso asumiendo los resultados de búsqueda de Chrome con respuestas predefinidas.
Estas tácticas intrusivas han sido una fuente de frustración para los usuarios de Windows durante años.
Aunque Microsoft ha afirmado que está investigando el problema y ha detenido los molestos pop-ups, la cuestión más amplia persiste: ¿hasta qué punto puede abusar la empresa de su propio sistema operativo para promocionar sus productos?
Los usuarios argumentan que, una vez que han pagado por la licencia de Windows, no deberían verse afectados por anuncios invasivos y pop-ups molestos.
Windows es una herramienta esencial de productividad y no debe tratarse como un dispositivo lleno de anuncios.