El Doodle de Google de hoy rinde homenaje a Ferdinand Berthier, un educador sordo e intelectual francés. Desafió las normas sociales de su época al convertirse en uno de los primeros defensores de la cultura sorda, cuando las personas con discapacidad auditiva eran a menudo marginadas.
Nacido en Saône-et-Loire, Francia, en 1803, Berthier ingresó en el Instituto Nacional de Sordos en París a los ocho años de edad.
Aunque sus padres esperaban que aprendiera habilidades básicas para trabajos manuales, destacó en la escuela y fue inspirado por sus profesores, especialmente Laurent Clerc, a seguir una carrera en el campo de la educación.
Después de completar sus estudios, Berthier regresó al Instituto Nacional de Sordos como profesor y, a los 27 años, se convirtió en uno de los profesores más experimentados de la institución.
En 1834, Berthier organizó el primer banquete silencioso para los sordos en Francia. Con el tiempo, el evento empezó a contar con la participación de mujeres, periodistas y autoridades gubernamentales.
Además, Berthier tuvo éxito en su solicitud al gobierno francés para crear la Société Centrale des Sourds-muets, una organización que representaba los intereses de la comunidad sorda.
Esta fue la primera organización formal de este tipo, que promovía la educación de adultos y el apoyo mutuo para las personas con discapacidad auditiva.
Berthier aprovechó su creciente influencia para destacar a otras figuras inspiradoras y promover la lengua de señas y la cultura sorda.
Escribió libros sobre la historia de la lengua de señas y biografías de personas que lucharon por los derechos de los sordos.
Su trabajo también ayudó a expandir la Société Centrale des Sourds-muets en una organización global. En reconocimiento a su contribución, Berthier se convirtió en el primer sordo en recibir el honor de Chevalier de la Légion d’honneur, la más alta distinción de Francia.
Hasta el día de hoy, el legado de Ferdinand Berthier sigue influyendo en la lucha por los derechos de los sordos y la promoción de la cultura sorda.
Su trabajo pionero y su dedicación a la educación y la concienciación abrieron el camino para una mayor inclusión y reconocimiento de los derechos de las personas sordas en todo el mundo.
Via: Google