Hoy en día, los enlaces a menudo parecen haber perdido parte de su función. Aunque aún sirven como indicadores de relevancia, es evidente que pueden ser manipulados.
La Búsqueda de Google puede manejar esto hasta cierto punto, pero ha llegado el momento de avanzar hacia un nuevo modelo de indexación de internet.
En el pasado, cuando la blogosfera era más una conversación orgánica, la importancia de los enlaces era más clara. Sin embargo, a medida que la tecnología avanza y la inteligencia artificial se vuelve más sofisticada, es hora de repensar cómo interpreta Google la web.
Creo que este es el momento ideal para que Mountain View haga que su Búsqueda sea más inteligente.
Por ejemplo, si un medio produce contenido exclusivo, como nuestra publicación sobre Telegram Business, que abordó un tema que más tarde ganaría prominencia en toda la internet, ese medio merece un reconocimiento adicional.
Después de todo, está contribuyendo con algo único y valioso para los usuarios. Además, funcionaría como un «inicio» para una nueva era de internet en la que Google podría fomentar la diversidad y la creatividad.
Imagina un escenario en el que Google reconociera y destacara no solo los sitios más populares, sino también aquellos que ofrecen perspectivas innovadoras y contenido auténtico.
Además de inspirar a una nueva generación de productores de contenido, este enfoque también alentaría a los usuarios a explorar una variedad más amplia de fuentes y descubrir información relevante que de otro modo no encontrarían.
Este enfoque abriría puertas para medios más pequeños y productores de contenido que a menudo son ignorados debido a la falta de enlaces externos. La estructura de la antigua internet aún tiene mucho peso en la forma en que Google opera hoy en día.
Con el avance de la inteligencia artificial, Google tiene la oportunidad de adaptarse a esta nueva realidad. Al enseñar a su motor a entender mejor la dinámica de la web, la Búsqueda puede volverse aún más poderosa y precisa.
Los usuarios se beneficiarían al encontrar información relevante, independientemente de su fuente, mientras que los productores de contenido serían alentados a crear materiales exclusivos y de alta calidad.
Por lo tanto, creo que es hora de que Google repiense su enfoque y considere nuevos criterios para evaluar la relevancia de los sitios.
El futuro de la búsqueda puede residir en la capacidad de comprender y valorar el contenido producido, independientemente del tamaño o la popularidad del sitio.