Google ha anunciado un cambio que complacerá mucho a los fanáticos de la fotografía y el video: la función Video Boost, presente en los modelos Pixel 8 Pro y Pixel 9 Pro, ahora puede permanecer activada por defecto.
Esta novedad elimina la necesidad de habilitar la función manualmente antes de grabar, algo que, hasta ahora, era una gran inconveniencia para los usuarios.
Después de todo, ¿quién nunca olvidó activar una función y perdió la oportunidad de mejorar la calidad de un video importante?
Pero, ¿cómo funciona Video Boost? Cuando se activa, el teléfono crea dos versiones del mismo video. La primera es una copia compacta, con ediciones básicas realizadas directamente en el dispositivo.
La segunda es una versión más detallada, con más información, que se envía automáticamente a la nube de Google.
Allí, la inteligencia artificial de la empresa entra en acción, ajustando la iluminación, mejorando el HDR, aumentando la nitidez, equilibrando los colores y estabilizando la imagen. Después de procesado, el video regresa a tu teléfono, listo para ser visto y compartido.
Sin embargo, no todo es perfecto. A pesar de los beneficios, Video Boost aún tiene un punto que puede mejorarse: cuando se configura en 4K, consume mucho espacio de almacenamiento y hace que el proceso sea más lento.
Es posible cambiar a la calidad Full HD, pero, por ahora, esta configuración debe ajustarse manualmente en cada grabación. Sería ideal que Google permitiera establecer esta opción como predeterminada, facilitando aún más la vida de los usuarios.
La buena noticia es que la actualización ya se está liberando gradualmente para los dispositivos compatibles, como el Pixel 8 Pro, Pixel 9 Pro y Pixel 9 Pro XL.
Y hay expectativas de que la función también llegue al Pixel 9a, ya que debe compartir el mismo procesador Tensor G4 de la serie Pixel 9.
Con este cambio, Google está haciendo que la experiencia de grabación y edición de videos sea más accesible y práctica en el dispositivo.