¿Alguna vez te has preguntado cómo decide Google qué sitios son confiables y merecen aparecer en los primeros resultados de búsqueda?
Una patente registrada hace años por el gigante de las búsquedas revela un secreto fascinante: el comportamiento de los usuarios puede ser una señal poderosa para determinar la confianza de un sitio.
Y lo más interesante es que el algoritmo no comienza con enlaces, sino con las personas. ¿Quieres entender cómo funciona? ¡Vamos a desentrañar esta intrigante patente!
La idea detrás de la patente de «Trust Ranking»
Internet es un océano de sitios interconectados, pero no todos merecen la misma confianza. Google siempre ha buscado formas de identificar qué páginas son realmente relevantes y seguras para los usuarios.
Mientras que el famoso PageRank analiza enlaces entre sitios, la patente de Trust Ranking va más allá: comienza con el usuario.
¿Cómo funciona el Trust Ranking?
- Los usuarios confían en ciertos sitios (como foros, blogs especializados o sitios de noticias).
- Esos sitios, a su vez, recomiendan otros sitios confiables (a través de enlaces, menciones o comentarios).
- Google utiliza esta red de confianza para mejorar el ranking de las páginas en los resultados de búsqueda.
Es decir:
Usuario → Confía en Sitio X → Sitio X recomienda Sitio Y → Google prioriza Sitio Y
Es como un sistema de referencias, donde la confianza del usuario es el punto de partida.
¿Qué hace que un sitio sea considerado «confiable»?
La patente explica que Google puede usar diferentes señales para medir esta confianza:
1. Comportamiento del usuario (el «botón de confianza» invisible)
La patente menciona un hipotético «botón de confianza», que los usuarios podrían presionar para indicar que confían en un sitio. ¡Pero este botón nunca existió!
En la práctica, Google probablemente reemplaza esta idea con señales de comportamiento, como:
- Frecuencia de visitas (si un usuario accede siempre al mismo sitio, es señal de confianza).
- Tiempo en la página (cuanto más tiempo pasan, mayor es la relevancia).
- Tasa de rebote (si el usuario sale rápidamente, puede indicar desconfianza).
En otras palabras, tu audiencia es tu mejor aliada para posicionarte bien.
2. Enlaces y menciones de sitios especializados
Los sitios considerados autoridades («Vertical Knowledge Sites»), como portales de noticias, blogs expertos o foros, tienen un peso extra. Si ellos enlazan o mencionan un contenido, Google lo interpreta como un sello de confianza indirecto.
Ejemplo:
- Un experto en cámaras digitales recomienda un modelo en su blog.
- Google interpreta esa recomendación como un voto de confianza en el producto.
3. «Labels» (Etiquetas de confianza)
La patente también habla de «labels», que serían como etiquetas asociadas a un sitio. Por ejemplo:
- Un artículo sobre salud puede ser marcado como «síntomas» o «tratamiento» por un sitio médico confiable.
- Si un usuario busca «cáncer label:síntomas», Google prioriza páginas con esa etiqueta.
En la práctica, esto podría estar relacionado con palabras clave contextuales o menciones en contenido especializado.
¿Qué significa esto para los creadores de contenido?
Si Google prioriza sitios que los usuarios consideran confiables, ¿cómo mejorar tu posicionamiento?
Consejos para ganar la confianza de Google:
✅ Crea contenido de calidad – Si los usuarios pasan tiempo en tu sitio y regresan, es una gran señal.
✅ Consigue backlinks de fuentes confiables – Recomendaciones de expertos o sitios relevantes fortalecen tu autoridad.
✅ Ofrece una buena experiencia de usuario – Sitios rápidos, seguros (HTTPS) y bien estructurados son preferidos.
✅ Participa en comunidades y foros – Menciones en sitios de nicho pueden ayudar a construir tu reputación.
Conclusión: Google quiere que pienses en el usuario
Esta patente refuerza algo que Google siempre ha dicho: crea para las personas, no para los algoritmos. Si tu sitio es útil, relevante y gana la confianza del público, las posibilidades de posicionarte bien aumentan significativamente.
¿Qué te parece, curioso? Ahora sabes que, detrás de los resultados de búsqueda, hay un sistema complejo que usa el comportamiento de las personas para decidir qué es confiable.