Principales puntos destacados:
- Google utilizó sensores de movimiento de celulares Android para alertar sobre terremotos en casi 100 países.
- El sistema envió alertas erróneas durante los terremotos devastadores en Turquía en 2023.
- Errores en los algoritmos subestimaron la magnitud de los temblores, retrasando avisos críticos.
Durante años, Google ha utilizado la vasta red de smartphones Android para crear un sistema global de alerta sísmica.
El proyecto, poco divulgado hasta entonces, transformó más de dos mil millones de celulares en mini sismógrafos capaces de detectar temblores de tierra en tiempo real.
La iniciativa fue detallada en un nuevo estudio publicado en la revista Science, que muestra cómo el sistema ayudó a alertar a usuarios en cerca de 100 países entre 2021 y 2024.
Pero una falla crítica durante los terremotos que azotaron Turquía y Siria en 2023 sacó a la luz limitaciones importantes de la tecnología.
Cómo funciona Android Earthquake Alerts
El sistema, llamado Android Earthquake Alerts (AEA), utiliza los acelerómetros de los smartphones para captar las vibraciones iniciales de los terremotos. Al identificar un patrón compatible con un temblor, el AEA puede emitir dos tipos de alertas:
- «Be Aware»: Enviada como una notificación común para temblores menores.
- «Take Action»: Que dispara una alarma sonora incluso con el celular en modo silencioso.
El objetivo es avisar con segundos de antelación, tiempo suficiente para que la persona busque refugio o se aleje de áreas peligrosas. Desde su implementación, el sistema ya ha emitido alertas para más de 11 mil terremotos alrededor del mundo.
La iniciativa es considerada una alternativa accesible a los sistemas sísmicos tradicionales, especialmente en países que no cuentan con infraestructura avanzada.
Sin embargo, su precisión depende directamente de la calidad de las lecturas hechas por los sensores de los propios celulares.
La falla crítica en los terremotos de Turquía
En febrero de 2023, dos terremotos de grandes proporciones azotaron Turquía y Siria, matando a más de 55 mil personas e hiriendo a otras 100 mil.
El sistema de Google falló gravemente en ese momento. La empresa admitió que envió la alerta más débil para cerca de 500 mil personas, cuando en realidad el temblor exigía la alerta más severa.
Solo 469 celulares recibieron el aviso «Take Action» en el primer temblor, ocurrido alrededor de las 4:15 de la mañana, horario en el que la mayoría de las personas estaba dormida con los celulares en modo silencioso, lo que hizo que la alerta débil fuera prácticamente ineficaz.
El error ocurrió porque los algoritmos del AEA inicialmente estimaron que el temblor tenía una magnitud entre 4.5 y 4.9, cuando en realidad fue un terremoto de 7.8 grados en la escala de magnitud de momento (MMS).
Durante el segundo temblor, la subestimación también ocurrió, con cerca de 8 mil alertas fuertes enviadas, contra casi 4 millones de alertas leves. Google afirma que, desde entonces, los algoritmos han sido actualizados para evitar fallas similares.
Reconocimiento tardío y cuestionamientos
A pesar de que la falla fue evidente, Google solo reconoció oficialmente los errores más de dos años después, en un comunicado a la BBC y en el propio artículo científico.
La demora en admitir el problema plantea preguntas sobre la transparencia de la empresa en situaciones que involucran riesgos para la vida humana.
El sistema de alertas, aunque innovador, lleva la responsabilidad de ofrecer seguridad a millones de personas. Cuando falla, las consecuencias pueden ser trágicas.
El reconocimiento de los errores por parte de Google es un paso importante, pero no borra el impacto de la falla.
Se espera que, con los ajustes en los algoritmos y una mayor vigilancia sobre la precisión de las alertas, la tecnología pueda evolucionar y volverse más confiable para futuros desastres naturales.
El uso de celulares como sensores de emergencia aún tiene un gran potencial, pero exige mejoras constantes y responsabilidad.