✨ Puntos clave:
- Google y ChatGPT discrepan en el 62% de las recomendaciones de marcas, lo que demuestra lo inestable que sigue siendo el panorama de las búsquedas con IA.
- Google AI Overviews cita más fuentes y lista muchas más marcas que ChatGPT.
- Para las empresas, la fragmentación entre plataformas representa tanto riesgos como oportunidades en la lucha por la visibilidad en las búsquedas con IA.
Cuando Google y ChatGPT no hablan el mismo idioma
Un estudio de BrightEdge reveló que las respuestas sobre marcas proporcionadas por Google (en su función de AI Overviews y en el AI Mode) y por ChatGPT coinciden en menos del 40% de las ocasiones.
En la mayoría de las consultas, cada plataforma sugiere empresas diferentes. Solo el 17% de las preguntas resultó en las mismas marcas siendo mostradas en todas las herramientas analizadas.
Esto demuestra que la experiencia de quienes buscan recomendaciones en internet ya no es única ni estandarizada.
Mientras que antes Google solía centralizar la visibilidad de las marcas en la web, ahora los sistemas de inteligencia artificial ofrecen escenarios fragmentados, que varían no solo en los resultados, sino también en la forma en que justifican sus recomendaciones.
Google habla más, ChatGPT habla menos
En la comparación, Google AI Overviews presentó marcas en casi el 37% de las consultas, mientras que ChatGPT mencionó nombres de marcas en solo el 4%, y en buena parte de las respuestas simplemente no citó ninguna empresa.
Además, Google AI Overviews listó, en promedio, seis marcas por pregunta, más del doble que ChatGPT.
Otro punto importante es la diferencia de estilo:
- ChatGPT menciona marcas, pero no siempre indica sus fuentes.
- Google tiende a citar de dónde obtuvo la información, incluyendo enlaces con frecuencia, lo que refuerza su estrategia de mantener a los usuarios conectados a su ecosistema de búsqueda.
¿Qué cambia esto para consumidores y empresas?
Para quienes investigan productos o servicios, la consecuencia es clara: dependiendo de la plataforma elegida, la respuesta puede ser totalmente diferente.
Para las empresas y marcas, el desafío es adaptarse a una realidad en la que estar visibles en un solo «motor de búsqueda» ya no es suficiente.
El estudio también mostró variaciones por sector:
- Áreas como salud y educación presentaron los mayores índices de divergencia.
- El e-commerce tuvo la menor divergencia.
Esto sugiere que los algoritmos se basan en fuentes y patrones diferentes, lo que hace que el juego sea incierto para quienes apuestan por el marketing digital.
¿Problema u oportunidad?
Esta falta de uniformidad puede verse como un problema o como una oportunidad:
- Por un lado, la disputa por la atención del consumidor se volvió más inestable.
- Por otro, las posibilidades de ganar espacio en diferentes plataformas de IA han aumentado.