Google está intensificando sus esfuerzos en inteligencia artificial generativa desde la aparición de ChatGPT, basado en GPT-3 y ahora en GPT-4.
La empresa tiene varios productos basados en IA en desarrollo, como Bard y Duet AI, Assistant con Bard y un próximo modelo de lenguaje llamado Gemini.
En busca de garantizar la seguridad de los usuarios, Google ha decidido posicionarse en su defensa en caso de que cualquier contenido generado por IA utilizando sus herramientas resulte en problemas legales, asumiendo la responsabilidad por posibles infracciones de derechos de autor.
Google y otras empresas que trabajan con IA generativa han enfrentado un creciente escrutinio en relación al material utilizado para entrenar sus modelos y al contenido generado por las herramientas.
En respuesta a estas preocupaciones, Google ha optado por hacer públicos los datos disponibles en Internet para entrenar sus modelos de IA, en un intento de reducir las críticas relacionadas con la privacidad del usuario y las infracciones de derechos de autor.
Además, como parte de su posición defensiva, Google ha anunciado que ayudará legalmente a los usuarios afectados en caso de que cualquier obra de arte o contenido generado por sus herramientas de IA resulte involuntariamente en una violación de derechos de autor.
Esta protección se ofrecerá a los suscriptores de los servicios comerciales de IA generativa, como Vertex AI y Duet AI, disponibles en Google Cloud y Workspace.
Sin embargo, es importante destacar que esta asistencia legal solo se proporcionará en casos de violaciones accidentales de la ley de derechos de autor, no cubriendo las infracciones intencionales.
