En un giro histórico en su negocio de búsqueda, Google está considerando cobrar por nuevos recursos «premium» impulsados por inteligencia artificial generativa.
El cambio propuesto marcaría la primera vez que la empresa pondría alguno de sus productos principales detrás de un muro de pago, revelando su continua lucha con una tecnología que amenaza su negocio publicitario.
Google está evaluando opciones que incluyen agregar ciertos recursos de búsqueda impulsados por IA a sus servicios de suscripción premium, que ya ofrecen acceso a su nuevo asistente Gemini AI en Gmail y Docs.
Aunque el motor de búsqueda tradicional de Google seguiría siendo gratuito, los anuncios seguirían apareciendo junto a los resultados de búsqueda, incluso para los suscriptores.
Sin embargo, el cobro representaría la primera vez que Google, que durante muchos años ofreció servicios gratuitos a los consumidores financiados completamente por publicidad, haría que las personas pagaran por mejoras en su producto principal de búsqueda.
Google ha estado luchando por responder a la amenaza competitiva de ChatGPT, probando un servicio de búsqueda experimental impulsado por IA que proporciona respuestas más detalladas, pero aún no ha agregado estos recursos a su motor de búsqueda principal.