Motorola se enfrenta a un desafío en México debido a la venta de teléfonos inteligentes no autorizados que llegaron al mercado a través de revendedores no autorizados.
Para hacer frente a esta situación, la empresa ha decidido tomar una medida drástica: deshabilitar completamente estos dispositivos.
Según la información disponible en una página de soporte de Motorola, la desactivación de los teléfonos inteligentes se debe a la alta incidencia de dispositivos irregulares en el país, que no cuentan con la certificación de las entidades reguladoras mexicanas y no han sido diseñados para funcionar en las redes locales.
Aunque estos dispositivos originalmente estaban destinados a otros mercados de todo el mundo, fueron vendidos por revendedores no autorizados en México.
Los usuarios reciben notificaciones sobre la situación justo después de la configuración inicial del dispositivo y nuevamente 10 días después. Después de 11 días de configuración, el dispositivo deja de funcionar por completo, restringiendo el acceso a archivos, funciones y aplicaciones, permitiendo solo llamadas de emergencia.
Motorola está ofreciendo un descuento del 30% en dispositivos Motorola «regulares» autorizados para su uso en México como forma de compensar a los clientes afectados por esta situación inesperada.